La obra invita en cada pieza a la búsqueda de la belleza, en especial en tiempos marcados por las distancias físicas y la falta de certezas sobre el mañana, que obligan a recurrir al arte para «romper desalientos»
La primera oportunidad para escuchar en vivo una selección de la placa será el próximo 27 de febrero en el Teatro Martí, de esta capital, en un concierto que aproximará a las piezas, pero en esa ocasión junto a la soprano Bárbara Llanes Foto: Tomada de Prensa Latina
El pianista José María Vitier, junto a la flautista Niurka González, gestó un nuevo disco XXI Bienaventuranzas, presentado esta semana.
Prensa Latina informó que el fonograma está formado por 21 composiciones, y propone «desde su eclecticismo y variedad alternativas expresivas confluyentes en una misma mirada participativa y convocadora de esperanza», según apuntan las palabras introductorias de esta suite, dedicada a la capacidad interpretativa de González.
La placa, como describe este medio, invita en cada pieza a la búsqueda de la belleza, en especial en tiempos marcados por las distancias físicas y la falta de certezas sobre el mañana, que obligan a recurrir al arte para «romper desalientos» y buscar esencias regidas por otro tempo.
Vitier rememoró en conferencia de prensa la conceptualización bíblica de las Bienaventuranzas, concebidas como esa oración que surge en medio de la crisis, en momentos difíciles para llevar fe y confianza en el advenimiento de tiempos mejores.
Igualmente comentó sobre el nacimiento del álbum a partir de una serie de oraciones musicales publicadas desde su perfil en la red social Facebook, que originaron sin previa planificación las composiciones del disco, y toda la articulación de expresiones artísticas originadas por este: pintura, diseño y documental.
Por otro lado, González consideró excepcional la experiencia que exigió una alta preparación, horas de ensayo y trabajo en equipo para lograr el acople perfecto, conjugado con el estado de ánimo de cada tema.
El material audiovisual gestado durante el proceso de ensayo y grabación, estuvo a cargo del cineasta Lester Hamlet, quien incluyó en el material entrevistas a los protagonistas del proyecto y otros momentos especiales.