Escrito por Mayté Madruga Hernández palabranueva@ccpadrevarela.org Niurka González está unida a la flauta no solo por el talento, sino por el respeto al instrumento y a la música. Con su andar pausado tal pareciera que la melodía que desprende cuando toca siempre la acompaña. La flauta es entonces instrumento guía de esta conversación. Descubre mi entrevistada un universo fabuloso en la música, no solo para interpretarla, sino para estudiarla, para enseñarla. Ha expresado en otras ocasiones que escoge a sus alumnos, ¿en qué se basa para esto? “Primero que ellos quieran dar clases conmigo. Tiene que haber un interés de ellos por mi manera de trabajar. Soy una profesora bastante exigente y que demando bastante de ellos, entonces si los estudiantes no tienen esa inquietud, pues yo no me acerco. La inquietud es lo fundamental, porque a veces tenemos alumnos que llegan, sobre todo al Instituto Superior de Arte, con distintas maneras de hacer, con distintos enfoques y con distintas carencias también. Yo lo que busco es esa chispa, ese ímpetu de los jóvenes de ‘comerse el mundo’, para mí eso es lo fundamental, porque todo lo demás se puede arreglar, pero hay que tener ese tesón, esa vocación y esa entrega”. El crítico y periodista Joaquín Borges-Triana expresó sobre su CD Flauta Virtuosa: “Semejante variedad de autores demanda de quien escoja tal ecuménico repertorio para un fonograma, un tremendo esfuerzo de interiorización de estilos y diríase que un desdoblamiento interpretativo, para asumir la variedad de propuestas creativas de cada uno de los compositores representados en el fonograma”. ¿Cómo lo sintió usted? “Yo soy una estudiosa de los temas a los que me voy dedicando por momentos, no tengo una línea de trabajo fija, o sea no soy de las que solo toco barroco, u otro período nada más, voy cambiando y trato, pues, de situar mi mente, mi cuerpo en un trabajo previo de documentación de la época, de cómo era tratada la música de los compositores en cuestión, hago ese trabajo investigativo antes, que se estila mucho cuando se interpreta música antigua. Es un concepto que los intérpretes llaman interpretación históricamente informada, yo lo traslado a todo lo que hago. ”Yo tengo un trabajo sobre la música de Leo Brower para flauta con este concepto porque es fundamental y me parece que es atemporal, que le sirve a todo, porque música del pasado es la que se escribió hace dos minutos, ya eso es del pasado. Pero el tiempo no es el único elemento, también está la geografía, pues uno puede estar en un extremo del globo terráqueo y la otra persona en el otro y hay realidades diferentes, contextos diferentes, situaciones disímiles que de algún modo enriquecen la interpretación; enriquecen lo que uno pueda transmitir. Esto no es fundamental –no soy fundamentalista–, pero a mí me gusta, disfruto saber cómo era, en qué época se hizo, cómo eran los instrumentos, qué interpretaban en ese momento… para entonces, en este moderno que yo toco, tratar de buscar una sonoridad que se asemeje”. Sobre este artículo titulado Obras para flauta de Leo Brower. Pautas para una interpretación históricamente informada, ¿qué más puede decir? “El artículo está basado en un diplomado que yo hice en la Universidad de San Gerónimo, es una tesina, que fue tutoreada por Mirian Escudero. Es un tema novedoso porque no está muy trabajado. También los temas de investigación en la parte de la interpretación no es de lo que más abunda. Para los intérpretes destinar un tiempo a la investigación es complicado, porque uno siempre tiene muchísimo tiempo de estudio práctico individual o para el repertorio que está montando. ”En esta tesina, luego de hacer un estudio analizando ese concepto de lo que es la interpretación históricamente informada, el cual solamente se utiliza para música escrita antes de 1600 o de 1750, o sea música renacentista o barroca, yo pregunto: ¿por qué no se puede traer ese concepto a la actualidad?, y decir, bueno, pues yo también hago una interpretación históricamente informada de las obras del Maestro Brower, porque he consultado los manuscritos; porque estudié cómo es que él trató el tema de las grafías; por qué en una edición él puso un efecto de una manera y por qué en la otra lo hizo distinto; por qué a lo mejor utilizó este formato porque eran los músicos que él tenía disponibles, o porque el local no servía para poner a la orquesta más grande y tuvo que poner la pequeña. Todos esos son elementos que aportan a una obra. ”El artículo se construyó así, como un análisis de las obras y de algunas pautas”. Me decía que los intérpretes no se dedican a la investigación por el tiempo que les lleva y que resta tiempo de ensayo, sin embargo usted tiene una vasta obra como intérprete y también realizó la investigación, ¿cuán importante cree que pueda ser para los intérpretes realizar investigaciones de este tipo? “Desde mi experiencia es importante. Primero, porque uno a veces está un poco alejado del acucioso y maravilloso trabajo que realizan los musicólogos y los investigadores. Los intérpretes a veces decimos que lo importante es tocar, pero esto también es muy importante, porque sostiene toda una línea de trabajo y todo un mundo que es significativo académicamente, es otra cosa; o sea hay unas pautas académicas con las cuales tampoco nosotros estamos muy relacionados y que son muy importantes para las categorías y todo lo que es la docencia, la cual es muy estricta, entonces en ese aspecto también se aprende muchísimo; además de materias como la historiografía y una serie de cosas con las que uno no tenía tanta relación. Estas investigaciones te incentivan y te incorporan nuevos conocimientos. Para mí fue muy revelador e importante”. El Festival de Música Leo Brower es un verdadero “maridaje de músicas inteligentes”, ¿cómo ha sido para usted tocar con disímiles intérpretes a lo largo de estos años? “Yo he participado en los festivales desde el primero. Siempre es un aprendizaje porque el maestro no escoge la música por la música, por llenar el espacio. “Un maridaje de músicas inteligentes” es un concepto detrás de lo que se interpreta. Existe en el evento la intención de mostrar piezas que no son las más tocadas, y esto es bueno porque uno siempre suele ir a los cánones y estereotipos de la música de concierto, que son maravillosos y los adoro, pero hay todo un universo diferente que también hay que mostrar”. flauta ¿Qué cree que le pone Niurka intérprete, a las obras que toca? “Primero es mucho respeto por la música. Me gustaría decir que yo no pretendo ser una flautista, que veo y llevo mi instrumento y todo lo técnico no para ser buena flautista o una gran ejecutante, sino para ponerlo al servicio de eso más grande que es la música, por lo tanto, para mí es igual de importante si tengo que tocar en un concierto tres notas como si tengo que tocar 290, para mí es igual de importante. Entonces sería eso, saber mi función en cada cosa que hago, disfrutarla al máximo y que eso sirva para saber qué es la música, que es a lo que uno se debe. A mí lo que me gusta que digan: no, ella es música, eso para mí es muy grande. ”Para llegar a ese fin me valgo de mi instrumento y para tocarlo me valgo de recursos técnicos y de ejercicios. Debo tener una cantidad de engranajes para poder ser efectiva con la música que sea, por eso lo mismo interpreto la música de Silvio, la música de Leo, que toco con una orquesta. Es ese sentido de interpretar la música, sea la que sea, con profundo respeto”. ¿Qué me pudiera decir sobre el documental Canción de barrio, en el cual participa? “El material es sobre los barrios. Los conciertos de Silvio son un pretexto, es una música que acompaña a lo central: los barrios, la realidad de todas esas personas que viven en esos lugares. El documental prioriza la dignidad de esas personas, que en su mayoría tienen vidas complejas y muy duras.”También muestra lo importante que es la cultura para todo, porque te mejora la vida. Hay situaciones que uno no puede resolver, pero la cultura te abre puertas, te enseña otras realidades, incluso hay públicos que no son los que consumirían, por decirlo de alguna forma, el tipo de música que interpreto. Sin embargo, hemos llevado a Hayden, la ópera Carmen. Hay que hacer esas cosas, porque eso también salva y ayuda”.
Fuente: Palabra Nueva. Revista de la Arquidiócesis de La Habana.
Palabra Nueva. Febrero 2015