Vino a este mundo con unos enormes deseos de cantar, aunque con el tiempo llegó a considerar que no poseía aptitudes para el canto. Y no obstante, la experiencia que vivió de pequeña con el grupo Meñique, bajo la tutela de la notable maestra María Álvarez Ríos, le valió de mucho a la dotada concertista Niurka González: “Me puso en el camino de la música”, le confesó en exclusiva a Juventud Rebelde.\r\n \r\n“No encuentro que mi voz sea nada especial… eso en cuanto al canto. En cuanto a María Álvarez Ríos, siento un gran agradecimiento hacia su persona. Una profunda admiración por la labor que realizó y por su condición de pedagoga excepcional”, reconoció quien a los 11 años debió escoger entre diferentes instrumentos: flauta, clarinete, saxofón, percusión, guitarra, trompeta…\r\n \r\n“Bueno, esa elección siempre es complicada. En mi caso te digo que no podía haber sucedido de mejor manera. Empecé en el conservatorio con clarinete (no alcancé plaza para flauta) y luego vino la flauta porque siempre me apasionó ese instrumento. Finalmente terminé excepcionalmente mis carreras (flauta y clarinete).\r\n \r\n“Y digo excepcionalmente porque fue un caso raro, creo: si mal no recuerdo, fue la primera vez que se autorizaba una doble carrera en instrumentos de viento”, afirmó esta destacada intérprete que actuara recientemente como solista en la Semana Mozart en Salzburgo, junto a la Orquesta Sinfónica del Instituto Superior de Arte (ISA).\r\n \r\nEra la primera vez que la joven orquesta, adjunta al Lyceum Mozartiano de La Habana y dirigida por José Antonio Méndez Padrón, se presentaba en Europa, pero ¿estaba Niurka nerviosa? “La obra de Mozart me acompaña desde principios de mi carrera musical, a pesar de que no tenemos demasiado repertorio para flauta (Mozart declaraba que era un instrumento demasiado desafinado). La belleza incomparable de las frases musicales y la exigencia técnica y expresiva que requiere la interpretación de sus composiciones me apasionan, de modo que desde temprano he trabajado casi toda su producción para mi instrumento.\r\n \r\n“Para la presentación en la Semana Mozart en Salzburgo, fui convocada por la misma orquesta. Este concierto implicó una gran responsabilidad; sin embargo, tocar acompañada de la Orquesta del ISA adjunta al Lyceum Mozartiano de La Habana, que lleva adelante un trabajo profundo con toda la música que interpreta, resulta un gran placer para mí. ¿El principal reto que enfrenté? El mismo que si el concierto hubiera tenido lugar en La Habana o en cualquier otra parte del mundo: comunicar a través de la música, divertirnos. Claro, en este caso había que sumar la responsabilidad que teníamos de representar a nuestro país y a su tradición musical. Así que estuve nerviosa, como todas las veces que toco… ni más ni menos.\r\n \r\n“De cualquier manera, las impresiones fueron muy positivas. Los conciertos que realizamos tuvieron una maravillosa acogida por parte del público que abarrotó los recintos. También recibimos muy buena crítica, así que felices…”, enfatizó González, quien se regocija de veras de la pedagogía musical, sin pensar que ello le toma demasiado tiempo a su quehacer como concertista.\r\n \r\n“Disfruto mucho la pedagogía porque se aprende mucho. Y es muy importante estar en contacto con los jóvenes. El secreto está en descubrir el arte de traducir en palabras los fenómenos musicales. Hacerse entender. Imparto clases en el Instituto Superior de Arte desde hace 15 años y comparto mi tiempo entre mis alumnos y mi actividad como concertista sin muchos sobresaltos.\r\nTomada de Juventud Rebelde. Por José Luis Estrada Betancourt\r\n\r\nSeguir la entrevista en Cubadebate: http://www.cubadebate.cu/noticias/2015/03/16/niurka-gonzalez-me-resisto-...